Dedicado a Don Joaquín Marta Sosa
Ese arte de la palabra
llamado Poesía,
antes de Don Joaquín
por mi respetada,
tan de lejos
como mi ignorancia me permitía.
Ahora, en tiempos de Don Joaquín,
se ha tornado
en una suerte de enigma
a descifrar,
desde aquella ignorancia.
Gracias a sus enseñanzas,
a sus palabras,
a su presencia,
en esencia, pura poesía
de una vida dedicada al Don
de la palabra soñada.
Y, ese enigma,
no es otro que,
un nuevo camino
alumbrado por un faro,
que va más allá
de lo humano cotidiano
visible.
Una semilla has sembrado en mí,
llamada ilusión,
inesperada,
en forma de nueva mirada,
de comprensión sobre ese viaje
llamado VIDA.
Y que a su gracia debo
mi nueva compañera,
por nombre,
POESÍA.
Javier Antunez Blanco ©
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