Escucha aquí » La música y el piano»
Asomado en mi ventana observo que en el ático de enfrente una joven
toca el piano despertando una apacible melodía
que me sumerge en mundos espirituales
Alzando la voz hacia ella le pregunto.
Quisiera provocarte una grata reflexión
que brota de mi curiosidad
¿Qué sentirías si el piano fuese una persona?
Ella, con una mirada luminosa y rebosante de alegría
me responde:
Catalizador de emociones, alma gemela cuando
necesito contactar con la música,
amigo fiel, hombro en el que reposar la cabeza,
consuelo de ausencias, nostalgias, abatimientos.
Siempre dispuesto a compartir la niña
que hay en mí: gozo, alegría, juego.
Siempre compañero de vida con el que recrear
lo recibido de grandes creadores y de quienes
me colmaron de amorosas melodías y canturreos.
Seguidamente, se me ocurrió una última pregunta
con la que poder alimentarme de este esplendoroso
mundo musical ¿ Y la música que es para ti ?
Ella, con una grata y amorosa sonrisa, responde:
Primicia de la vida desde el vientre materno
vitaminas para el alma,
medio de expresión de las profundidades,
hilo conector con todos los que me precedieron,
lenguaje universal con el que expresar la vinculación
con todo lo creado, ritmo vital y armonía espiritual,
cúspide del sentir, pensar…
A raíz de inducirme esa gran pianista
en el arte de la sonoridad y de las emociones,
donde hoy en día escucho las genuinas creaciones
de grandes compositores, cantantes y músicos,
me he dado cuenta de que la música es el motor de mi vida,
porque me evade de todos los problemas
que existen en la tierra.
© Andoni Fernández Publicado el día 21 de mayo de 2024
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